El pan y las tortillas

Los precios del trigo y del maíz, dos de los cereales que constituyen una inmensa base de nuestra alimentación, sobre todo el maíz, por supuesto, han caído más de un 40% desde el mes de mayo. Así lo reporta hoy el New York Times.

Me refiero a los precios mundiales. Según estos indicadores, el pan debería ser más barato. Subió como cohete a partir del año pasado cuando los precios aumentaron en el mercado mundial. Pero lo cierto es que el pan sigue costando exactamente lo mismo; o más.

Y las tortillas las continuamos pagando igual de caras aunque hayan bajado los precios del maíz. En este asunto, como en tantas otras instancias, la mano del mercado falla y seguirá fallando hasta el fin de nuestros días.

Por razones como estas es necesario que los gobiernos intervengan en tantas cosas, en beneficio de los pueblos. El mito capitalista de que los mercados se autorregulan es eso, una ficción, una invención.

Les juro que a mí, que vivo en Guate, el centro del poder económico, no me ha llegado el ‘derrame’ de una macroeconomía sana. Y eso que Guatemala ha vivido, en las últimas décadas, un auge económico singular. Repito: macro.

Ahora bien, si a mí no me ha llegado una sola gota del derrame de esa mano misteriosa de Adam Smith ¿qué le habrá tocado a los campesinos que viven en Barillas y en sus alrededores?