Apenas unos contrastes

Los medios informan sobre el sueño mojado de la presidenta del Banco de Guatemala, que anunció ayer un alza en el ingreso per cápita nacional: 19,137.20 quetzales, que traducidos vienen a ser 2,500 dólares. Si el per cápita fuera real, todos los ciudadanos guatemaltecos estaríamos ganando esa suma anualmente. Es decir, 1,600 quetzales mensuales. Aún así, andaríamos mal, porque la canasta básica ha sido calculada por las autoridades en el doble de esa suma. Pero ya sabemos que mientras unos ganan millones, los otros apenas perciben una miseria. El 52% de los guatemaltecos vive bajo la línea de la pobreza.

En los mismos medios se informa de dos hospitales donde se han suspendido las operaciones que no son de emergencia porque los fondos que les llegan --ni siquiera los que les han asignado en el presupuesto-- apenas durarán hasta el mes de agosto. Y en Ixcán el hospital carece de médicos, no hay anestésicos, ni medicamentos, ni siquiera agua pura. La directora del hospital de Ixcán, para una comunidad de más de 86,000 almas,se siente esperanzada: 'tenemos el ofrecimiento de la brigada cubana de enviar un cirujano o un traumatólogo cuando tengamos el equipo necesario.

Este gobierno del señor Berger, gobierno de los mismos de siempre, terminará como han terminado todos los gobiernos del período de la democracia formal --salvo Vinicio Cerezo, conste-- con el rabo entre las piernas ante la opinión pública, pero sus adláteres habrán ganado dinero a espuertas. Para ellos, el ingreso per cápita es un chiste. Y para el resto, una injuria.