Al contrario de lo que hacen los candidatos en Guate, que si no ganan la presidencia se apuntan para el congreso, Ségoléne Royal ha declinado el presentarse como candidata a diputada para dedicarse a dirigir la oposición a Sarkozy. Durante la recién pasada campaña se pronunció en contra de la acumulación de cargos, y ahora, cumple.
Es muy probable que adquiera más adeptos al frente de la oposición, y para las próximas elecciones a la presidencia, podría llegar al poder. Le apuesta a las futuras acciones de Sarkozy, que de pronto representa a una Francia conservadora, poco conocida desde la Revolución Francesa.
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1 comentario:
Me alegra porque Ségoléne necesitaba un recorrido más largo antes de presentarse a las elecciones (esperemos que no tan largo como el que tuvo Mitterrand) y sobre todo, dominar su partido.
Saludos.
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