Y mientras los wasps alzan los brazos al cielo o se dan golpes de pecho, en otra parte de EEUU, en Los Angeles, donde el 42 por ciento de los residentes son inmigrantes latinos, las ollas se preparan para la celebración navideña por excelencia: los tamales.
Tamales colorados o negros, de Guatemala -–no hay que olvidar los paches de papa-- los tamales de cada región de México donde los hay verdes o de camarones, por ejemplo, los nacatamales de Nicaragua… este post no alcanzaría para nombrar los ticucos, los pishtones, las dobladas, las gorditas, los tacos, en fin, los cientos de alimentos y bebidas que salen del maíz, el material del que estamos formados los seres humanos en Mesoamérica.
domingo, diciembre 14, 2008
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