La Posada Belén

El edificio es de la época de la colonia y albergó, en su momento, a una congregación religiosa de aquel tiempo. Ahora está a cargo de las belemitas y se usa para cónclaves y congresos como este, de literatura centroamericana. Alrededor de la fuente del primer patio se congregan los escritores y los críticos venidos de Europa y Estados Unidos, principalmente, cuando no están escuchando los papers en elguna de las cinco salas que se usan para las mesas de trabajo.

Los jardines se extienden tentadoramente hacia el Oriente, pero aún no he podido alcanzarlos. En el camino me encuentro con amigos que he hecho a lo largo de varios años.

Los profesores universitarios asisten a estos congresos para hacer crecer su curriculum. Yo acudo porque me aleja de la vida diaria.

Hoy he soñado despierta con el día en que pueda vivir aquí, en Antigua Guatemala, donde a pie se puede llegar a cualquier parte. Un lujo vivir en una ciudad que se extiende por cinco cuadras en cualquier sentido a partir del Parque Central, donde el carro permanece en el garage sin que haya, como en la Ciudad de Guatemala, que subir en él y andar dos kilómetros para llegar al centro comercial más cercano.