Pensar la reelección

Pancho Villagrán reflexiona en voz alta en su columna de hoy sobre la posibilidad de la reelección en el caso de la presidencia. Pone como ejemplo a Nicaragua, donde acaba de ser reelecto Daniel Ortega, luego del desastre de los gobiernos neoliberales que han debido aguantar en aquel país. No lo dice Villagrán Kramer, pero ahí queda implícito.

La propuesta de Pancho es pensar sobre la reelección que plantea abiertamente Vinicio Cerezo. A mí siempre me pareció que Cerezo ha sido el mejor de los gobernantes que hemos tenido desde que los militares abandonaron el poder. Bueno, abandonar es un decir, porque el propio Cerezo dijo a principios de su mandato que apenas tenía ganado el 30 por ciento del control, hablando de los militares.

Pero él fue quien debió ganar el premio Nobel de la paz y no el tiquillo, porque fue Vinicio quien promovió Esquipulas I y II y todo lo que ello supuso. Después de Vinicio vinieron Serrano y de León; Arzú, durante cuyo gobierno se comenzó a hacer pìñata con los haberes ciudadanos; el limpísimo gobierno del FRG, partido con el que gobierna, a veces, el señor Berger, representante del capital guatemalteco y de algunas transnacionales.