Las tumbas más caras

Choque de automóvil verde, una obra de Andy Warhol pintada en 1963 se vendió por 53.1 millones de euros en una subasta de Christie's. Lo más que se había ofrecido por una obra de este autor eran los 12,8 millones de euros que alguien pagó en noviembre pasado por un retrato del líder comunista chino Mao Tse Tung, del año 1972.

Sucede, sucede a cada rato, pero no me conforma. Me parece repulsivo que Christie’s y Sotheby’s funcionen de la manera en que lo hacen. Pero indecente el que haya quienes estén dispuestos a gastar fortunas con las que se podría paliar el hambre o cambiar unas condiciones infames en las que se encuentran pueblos enteros. Invertir en desarrollo para Jocotán o Camotán esas sumas cambiaría para siempre el destino miserable de sus habitantes.

¿Qué tal unas subastas para quienes quieran dar más dinero para apoyar la investigación de armas contra el sida, el cáncer? No, eso no es un objeto que pueda guardarse en una bóveda secreta.

Muy necrófilos deben ser los ‘dueños’ de las obras de arte así adquiridas para invertir tanto en una tumba.