Lula, el negociador

‘No es cierto que le hayamos dado la espalda a esta región. A Estados Unidos no se le da el crédito que merece por su ayuda’, lloriqueaba ayer el inefable en Sao Paulo a donde llegó tratando de paliar la dependencia de su país del petróleo venezolano.

Pero su anfitrión, Luiz Inácio Lula da Silva, que sabía a lo que llegaba Bush no solo firmó un acuerdo bilateral que busca la cooperación en la producción de biocombustibles. Se negó a hablar de la cuestión venezolana con el presidente de EEUU; reclamó a su homólogo los altos aranceles que el bioetanol brasileño tiene en el país del norte.

Y mientras ambos funcionarios hablaban, en Buenos Aires el ministro de hacienda de Lula, anunciaba la incorporación brasileña al Banco del Sur, el proyecto maestro de Hugo Chávez para financiar la integración en el Sur de América..