Dedicarle página y media a una entrevista complaciente con José María Aznar ha puesto en evidencia, una vez más, la tendencia real de los dueños --y por lo tanto la línea editorial-- de Prensa Libre. Sobre todo cuando uno de los más destacados accionistas es el autor de la entrevista.
Aznar no dice nada que no haya dicho antes, excepto afirmar que no le gustaría que juzgaran a un español en otras partes del mundo, lo que no deja de ser parte de la típica reacción post colonialista que ya le conocemos. Lástima. Se podría ocupar mejor el espacio en el diario.
domingo, noviembre 12, 2006
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4 comentarios:
Ni me miente a Aznar...Ni se imagina la penosa imagen que tenemos los españoles de él y la sombra alargada y funesta que arroja aún sobre su partido.
Vera usted, hace unos años asistí por casualidad a unos cursos que la Fundación Cánovas del Castillo (ahora dentro de FAES, fundación que preside Aznar), daba a políticos de latinoamérica, entre ellos varios guatemaltecos, que son diputados ahora. Le sorprendería comprobar las técnicas de manipulación y tergiversación que les enseñaban.
Con Aznar háganme un favor: olvídenlo.
Pero lea usted Prensa Libre de hoy verá como el entrevistador sigue escribiendo hoy sobre el otro innombrable.
Ya he leido, tremendo.
Gracias.
Prensa Libre es el perfecto ejemplo de un oxímoron.
Y eso de Periodismo Independiente, Honrado y Digno... el lema de porqué Guatemala está como está.
La responsabilidad es de todos...todos nosotros.
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